Se trata del mayor hurto de pinturas realizado en los últimos veinte años.
Los cuadros robados el domingo 10 de febrero de los corrientes en Zurich, pertenecen a la colección Emil Bührle y lcanzan los 162 millones de dólares, estas son obras de algunos de los más representativos de la pintura impresionista del siglo XIX. Se trata de obras de Paul Cézanne “L’enfant dans une veste rouge” (1888-90), Edgar Degas “Ludovic Lepic et ses filles” (1871), Vincent Van Gogh “Branches de marronier en fleurs” 81890) y Claude Monet “Champ de coquelicots pres de Vétheuil” (1879).
Paul Cézanne
Este hurto se produjo cuatro dias después del ocurrido en el centro cultural del distrito de Pfaffikon em Suiza, donde fueron robados dos cuadros de Pablo Picasso, valorados en 3 millones de euros.
Estos cuadros no pueden ser vendidos de manera abierta, debido a la naturaleza de su obtención, son únicos, originalmente bellos y perfectos, así es que se sospecha que pueden ser utilizados para negociaciones totalmente diferentes, como intercambio de personas, por ejemplo o simplemente algún enamorado del arte que se atreve a robar originales para su propio placer visual.
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